María Victoria Ortiz, “Tota”
Del 7 de junio al 18 de julio de 2012
El quehacer artístico es la confluencia de deseos, sensibilidades y experiencias estéticas y en este encuentro íntimo Tota nos comparte su mirada poética del mundo. Sus obras nacen del disfrute apasionado de la naturaleza en recorridos cotidianos, el encanto de las formas y superficies invitan a recorrer con la mirada y el tacto; las raíces del viejo árbol, el lino, el tronco, la piel, el tango. Su bagaje escultórico nutre además su pintura con la riqueza de texturas y objetos que se fusionan con colores de manera natural y espontánea.
“La palabra retrospectiva es un acto festivo para indagar. Esto me ha permitido pensar en un oficio del cual me enamoré hace poco más de 16 años. La escultura fue mi primer aprendizaje, el ojo se agudiza para lograr una estética acorde a lo que se quiere comunicar; cuatro años más adelante irrumpe la pintura con sus colores mágicos, y entre ambas surge un abrazo fraterno.
Las experiencias que nos conmueven irrumpen en lo más íntimo de nuestro ser, dejando huellas; huellas que nos animan a ahondar en nuestro pensamiento para reflexionar y profundizar sobre la vida, y es allí donde encontramos nuestro lenguaje creativo. Este es el fundamento que me lleva a elaborar lo que hago como artista.” |